¿CRUCERO O BUQUE DE GUERRA?
- Claudia Campo
- 22 mar
- 3 Min. de lectura
Rick Warren, pastor de la iglesia Saddleback en California dice: “Como cristianos estamos constantemente en batalla, en un buque de guerra, no de paseo en un crucero”
Me encantan los cruceros, por varios días estás navegando, con vistas espectaculares de la naturaleza, el mar, las gaviotas y los atardeceres. Durante el viaje tienes comida y bebidas ilimitadas a toda hora. No estás preocupado por nada, estás de paseo, de vacaciones.
Pero, de regreso a casa, llegamos a la vida real, que muchas veces está llena de problemas, desafíos y frustraciones. Y la pregunta es:
¿Cómo vamos a enfrentar los problemas diarios de la vida?
Solo tenemos dos opciones: ¿usaremos nuestro tiempo y energía para quejarnos, maldecir y lamentarnos? o ¿usaremos nuestra energía para ponernos en pie como guerreros, como soldados que se enfrentan a las circunstancias con determinación y valentía?
La Biblia nos compara con soldados[1]; nos dice que peleemos la batalla de la fe[2]; que no luchamos con las armas de este mundo, sino con el poder de Dios[3] y que Dios nos ha dado una armadura para protegernos en medio de la batalla[4].
Se preguntarán ¿quién es el enemigo? Pues tenemos muchos: el diablo,
el mundo y nuestra propia carne.
El diablo, anda como león rugiente buscando a quien devorar[5]. Entre sus estrategias están: acusarnos, engañarnos, hacernos pensar que no somos lo suficientemente buenos, recordarnos el pasado o robarnos la paz a través de circunstancias y personas.
El mundo, que hoy día se refleja en las redes sociales, nos presiona para hacernos pensar que no seremos felices si no somos como ellos o si no tenemos lo que otros tienen.
Y nuestra carne, nuestra condición humana, porque nos dejamos gobernar por nuestras emociones y, en consecuencia, nos saboteamos a nosotros mismos en el logro de nuestras metas y objetivos.
Ahora, ¿cuál es la solución? entre nuestro arsenal para pelear tenemos:
1. Declarar con fe las promesas de la Palabra de Dios[6]
2. La alabanza[7]
3. La oración[8]
Así que, cuando estés peleando la batalla en contra de la enfermedad, escasez, depresión, ansiedad, autocritica, culpa, rencor, problemas con tus seres queridos, etc. Levántate firme: declara las promesas de la palabra de Dios sobre tu vida; alaba a Dios con todo tu corazón y clama a Él por liberación; y nuestro buen Dios, no solo escuchará tu oración, sino que peleará tu batalla por ti[9].
Te adjunto el enlace de una lista de canciones de Nancy Amancio, que me han ayudado en medio de mis batallas, para enfrentar mis enemigos y obtener la victoria. Espero que sea de bendición para ti.
Con profundo amor y gratitud,
Claudia.
[1] 2 Timoteo 2:3 NTV Soporta el sufrimiento junto conmigo como un buen soldado de Cristo Jesús.
[2] 1 Timoteo 6:12 Pelea la buena batalla de la fe
[3] 2 Corintios 10:4 TLA Ni luchamos con las armas de este mundo. Al contrario, usamos el poder de Dios para destruir las fuerzas del mal, las acusaciones
[4] Efesios 6:10-11 TLA Finalmente, dejen que el gran poder de Cristo les dé las fuerzas necesarias. Protéjanse con la armadura que Dios les ha dado, y así podrán resistir los ataques del diablo.
[5] 1 Pedro 5:8 NVI Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.
[6] Marcos 11:23 NVI Les aseguro que si alguno dice a este monte: “Quítate de ahí y tírate al mar”, creyendo, sin abrigar la menor duda en el corazón de que lo que dice sucederá, lo obtendrá.
[7] 2 Crónicas 20:22 DHH Luego, en el momento en que empezaron a cantar con alegría himnos de alabanza, el Señor creó confusión entre los amonitas, los moabitas y los de la montaña de Seír, que venían a atacar a Judá, y fueron derrotados.
[8] 1 Crónicas 5:20 NTV Clamaron a Dios durante la batalla, y él contestó su oración porque confiaron en él.
[9] Éxodo 14:14 NTV El Señor mismo peleará por ustedes. Solo quédense tranquilos.
Muy buen mensaje. Gracias querida Claudia bendiciones 🌸