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UN NUEVO COMIENZO

Gracias a Dios, al tratamiento alternativo con el Dr. Calderón y a los amorosos cuidados de mi esposo, mis últimos exámenes médicos de antígenos de cáncer salieron nuevamente negativos y la resonancia magnética confirmó solo un pequeño tumor que sigue reduciéndose de tamaño.


Este último tratamiento en Villeta fue de dos meses y medio, durante los cuales tuve sesiones de sueroterapias cada semana, varios cambios en mi alimentación, ejercicio con un entrenador, largas caminatas, termales y mucho sol.


Recibir los sueros intravenosos se convirtió en uno de los momentos más anhelados de mi terapia porque cada vez que llegaba al centro médico sabía que además de altas dosis de vitaminas y suplementos, tendríamos una agradable sesión de risoterapia. Leidy, la enfermera y las chicas que trabajan en el consultorio, Martha, Luisa y Xiomara, la esposa del doctor, hicieron que mi tratamiento fuera muy divertido. Tanto que las voy a extrañar muchísimo y espero poder volverlas a ver muy pronto, pero ya de vacaciones.


Otra de las bendiciones más hermosas de nuestra estancia en Colombia fue compartir con mi amada amiga terapista Nataly Castillo y su maravillosa familia. El amor es la fuerza más poderosa del universo y sentirnos tan amados y rodeados de tanto cariño y atenciones trajo una sanidad y un bienestar incomparable a nuestras vidas.


También tuvimos la visita de nuestros amados amigos Enrique y Cristina Puentes, con los que disfrutamos de largas conversaciones con mucha risa, paseos, deliciosas comidas, caminatas y oración.


Al terminar el tratamiento, mi esposo y yo viajamos de Bogotá a Madrid para iniciar nuestra nueva vida en Aranjuez, España. Todavía se me hace un poco extraño estar en este lugar, nunca imaginé que iba a vivir en Europa, pero Dios muchas veces nos sorprende con cambios inesperados en nuestras vidas y con la manera en que Él orquesta todas las cosas para nuestro bien.


Recuerdo que muchas veces oraba anhelando un nuevo comienzo en algún otro lugar y de alguna manera eso fue lo que ocurrió cuando me trasladé de Virginia a Florida. Sin embargo, un pastor me enseñó que cada día puede ser un nuevo comienzo, la Biblia nos dice: “¡El fiel amor del Señor nunca se acaba! Sus misericordias jamás terminan. Grande es su fidelidad; sus misericordias son nuevas cada mañana”.


Cada día de vida que Dios nos regala es una oportunidad para un nuevo comienzo, para dejar atrás el dolor, la tristeza y los malos recuerdos y construir un nuevo presente más hermoso y radiante que nunca.


Robin Sharma, uno de mis autores favoritos, escribió: “Los seres humanos tenemos el hábito de recordar cosas que deberíamos enterrar y olvidar las cosas maravillosas que sería preciso recordar”.


Por eso te ánimo para que recuerdes solo las bendiciones que has recibido y te olvides de todo lo que te ha causado dolor. Dios renueva su amor inagotable cada mañana sobre tu vida para que puedas tener un nuevo comienzo cada día.


Por un buen tiempo, si Dios permite, voy a dedicarme a trabajar en mi segundo libro, así que, si no escribo este blog con frecuencia, ya sabes cuál es la razón. De todas maneras, si alguien necesita orientación con relación al tratamiento para el cáncer que he estado realizando no duden en comunicarse conmigo por whats app. Estaré encantada de compartir con ustedes sobre el milagro de sanidad que Dios está haciendo en mi vida a través de la medicina alternativa.


Un abrazo inmenso con todo mi amor,


Claudia.

 

 

 

 
 
 

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